Capitulo 44:

Entrenamiento especial.

Los siguientes días cada uno la pasó entrenando, Akeru, Sakumo y Shikaru. Akeru fue entrenada arduamente por cada miembro de su familia, su madre, su primo Neji con su esposa Tenten, su abuelo, su prima Kasumi, sus tíos , su tía y cuando faltaba una semana su padre decidió llevarsela para entrenar ellos solos. Su padre le ayudó a perfeccionar su Rasengan, aunque ella lo hacia sin usar clones, pues tenía un mejor control de chakra que él, su hija también tenía una gran capacidad de chakra, cosa que nadie podía explicar, Tsunade aventuró una explicación, como el Kyubi era un animal vivo, parte del chakra había sido heredado a sus hijos de alguna manera, había sido como una hoguera, que había crecido, estaba vivo, lo bueno es que ellos no habían heredado su personalidad, ademas el cuerpo de Naruto no podía manejar todo ese chakra, desde que había absorvido el del niño del templo del fuego, por lo que incrementó su poder y como el sello se fue debilitando con los años, su cuerpo necesitó un escape para hacer esa energia más manejable, así que utilizó a sus hijos para ello, por lo que ellos todos poseían un chakra el triple de lo común. Akeru estaba tratando de ver cual era su límite de Rasengan, en una batalla contra los clones de su padre._ bien, basta tu límite son tres, antes de que quedes sin chakra, lo cual es peligroso, por lo que te pido no uses el tercero, en caso de un contraataque quedarías a su merced. debes vencerlo al segundo, ahora me gustaría que tratarás de encontrar tu propio ataque_ dijo Naruto liberando a los clones y llamando a su hija a su lado, mirandola orgulloso_ como tu Raseng shuriken, papi ? _ preguntó Akeru, mirando concentrada a su padre_ si pero que sea sólo tuyo, que sea como una parte de ti, especial, creado por ti, usando todo lo que eres y conoces. Papá descubrí una pequeña catarata en el recodo sur río arriba, puedo ir despues de comer, necesito estar sola para pensar_ Naruto miró a su hija, tan seria, era extraño en ella, siempre alegre y bromista, se nota que estaba tomando en serio su entrenamiento, no era de extrañar, Hinata la había entrenado desde su más tierna infancia, y era natural para ella como respirar, siempre quiso que sus hijos sean fuertes y aprendieran que el trabajo duro es lo que da recompensas, no bastaba el que cada uno de sus hijos sea de por si mejores que él, en talento, sino que Hinata había inculcado en ellos la humildad y el esfuerzo, ninguno creía que era mejor que otros, sino que entrenaban para ser lo mejor que ellos puedieran ser, por ellos, por nadie más, ni siquiera se comparaban, ni veían a los demás, veían todo con naturalidad, simpleza, él estaba muy orgulloso de ellos, Hinata había sido una excelente maestra, pero sobre todo madre, cuando miraba su familia, amaba más a Hinata, era maravillosa, no sabia que haría sin ella, ella lo completaba, lo llenaba_ me parece bien las respuestas solo las puedes buscar tú, pero recuerda que estoy aqui para ti, te espero al anochecer, estará esperando con la cena, tu madre mandó comida como para un mes.

_ Akeru se fue en silencio, profundamente ensimismada, apenas afirmó con la cabeza, lo que su padre le había dicho, caminando de memoria llegó hasta la pequeña cascada, ya en ella, se sentó en una enorme roca a un lado de la caida del agua, el agua sataba cerca de ella, por la fuerza del agua, se quedó pensando y meditando en si misma. Ella tenía tipo viento como su padre y la familia Uzumaqui, pero no tenía mucho poder todavía como él, su madre le explicó lo que le hizo a su padre el Raseng shuriken cuando lo desarrolló al principio, y su poder no lo había dominado aún, eso se lo dijo cuando descubrió que tenían el mismo chakra, por tanto debía inventar un ataque que sacará mejor partido a su tipo, y fuera a la vez un ataque poderoso, se acordó de Sakumo su mejor amigo,él tenía tipo rayo y ya podía hacer ataques con él, claro era un Uchiha, de pronto le vino a su mente la imagen del simbolo de los Uchiha, un abanico para el fuego, eso era, en su mochila su madre le dió uno para el calor, rosado, pero ella lo metió en el fondo de la mochila, pensando que era muy femenino para ella, pero si lo usaba, si podía usar el chakra para crear ráfagas como de viento cortante, convinando el viento que creaba, como el abanico, con su familia, tierra del Huracan, eso era haría remolinos cortantes, esa sería su arma, tendría que usar sus brazos como abanicos, haciendo su chakra cortantes como shuriken, si su chakra era poderoso, incluso puede vencer a otro chakra, lo intentaré, primero trataré de cortar el agua, luego árboles, luego roca a intentarlo. Pasó toda la tarde primero tratando de acumular rápidamente chakra tipo viento, controlandolo, lo cual era fácil, pues su madre la había entrenado para controlar todo tipo de chakra era algo natural para ella, luego trató de darle forma, de cuchillo curvo, como un boomerang, cortando el aire, luego la cascada, cuando lo logró ya era de noche, fue a comer con papá. No dijo una sola palabra, y Naruto no le preguntó nada, hablaron de las travesuras de los gemelos o del tierno y dulce Kaze, de mamá de su prima y cuan en serio parecía su noviazgo con Kiba, éste pasaba más con los Uzumaqui que en su casa_ estoy pensando seriamente pedirle que se casen y se venga a vivir con nosotros_ dijo Naruto, medio en serio medio en broma, cuando estaban acabando de cenar_ bueno estamos cansados, creo que mañana tambiçén querras estar sola para tu entrenamiento final_ dijo Naruto mirandola de reojo_ si, pero pasado mañana quiero que luches contra mi con toda tu fuerza_ dijo ésta mirandolo fijamente, Naruto la miró y asintió_ pero quiero que descanses dos días por lo menos antes de la prueba, entendido?_ si padre_ hija ademas mañana quiero darte algo especial antes de que vayas a entrenarte sola, bueno ?_ si papi _ le dijo sonriendo como la antigua Akeru y lo besó en la mejilla, entró en la tienda y se acostó, Naruto la miró irse, sonrió pero luego frunció el seño, estaba pasando tan rápido el tiempo, ojalá nunca tenga que usar sus dotes para luchar por su vida o por alguien querido, para eso estaba él, para eso siempre deseó ser Hokage, al principio todo comenzó sólo para que los demás lo admiraran lo notaran, lo miraran con respeto, no con odio, resentimiento o aún peor miedo, pero cuando el tercero dió su vida se dió cuanta del verdadero significado de ser Hokage, proteger, proteger a los que se ama, ahora su vida estaba llena de gente que lo apreciaba, quería y él debía protegerlos era su deber, pero por sobre todo no quería que nadie viviera el infierno que casi destruyó a su amigo, Sasuke, nadie más perdería a nadie querido, no mientras él los protegiera con su vida, tratando de apartar los pensamientos sombrios que habían tomado su mente, se fue lentamente a su tienda de campaña que compartía con su hija, la miró ya estaba dormida, pobre había sido un largo día, por lo mismo mejor sería dormir, para lo que le esperaba mañana por la mañana.

Casi al amanecer despertaron tomaron desayuno charlando alegremente, cuando Akeru se preparaba para ir a su entrenamiento en solitario_ hija tal como te prometí, acercate_ sacó un pergamino pequeño y invocó..., de entre el humo salió un inmenso pergamino, el cual extendió frente a su hija_ ahora es tu turno, con un poco de tu sangra escribe tu nombre con la mano que escogas para invocar, dibuja tu nombre en el pergamino y luego pon tus cinco dedos al final_ su hija hizo lo que le instruía_ papá está tu nombre aquí, el del abuelo y del maestro Jiraya_ asi es ahora es tu turno, para invocar junta más chakra de lo habitual y pon tu mano con la que hiciste tu pacto en el suelo dí la secuencia... e invoca_ Akeru hizo exactamente lo que le decía, se concentró, la secuencia, puso su mano y grito el nombre del jutsu, despues del humo apareció un sapo pequeño pero perfectamente distinto a los renacuajos que invocó Naruto cuando Jiraya le enseñó el jutsu_ hija te envidió, y tú quién eres?, soy hijo de Gamakishi, dijo la ranita naranja con manchas verdes, con chalequito como su padre_ diablos! como a pasado el tiempo, yo soy Naruto amigo de tu padre, al que conocí cuando era de tu porte, esta es mi hija Akeru, quien te invocó, quiero que la ayudes en su entrenamiento_ me parece, pero tiene que darme algun bocadillo suculento que valga la pena, okay!_ Naruto miró a su hija, tenía los ojos grandes de asombro_ me parece justo papá, te gustan los bocadillos de arroz y pescado, mamá los hace deliciosos_ y le dió a probar_ mmmh!, delicioso, realmente te mereces que te ayude, ahora que somos amigos me traeras estos bocadillos cada vez que me invoques?, por favor?_ dijo la ranita con su mirada más dulce_ ¿ cómo te llamas?, gracias papá, nos vamos, nos vemos al anochecer_ preguntó la niña haciendole señas para que saltara a su hombro, para irse a entrenar, tomó su mochila y empezó su caminata_ Gamakenshin, te prometo ayudarte en lo que pueda. Cuando llegaron a destino ambos habían compartido anecdotas de sus respectivas familias, riendo, tenían un caracter parecido, alegre y despreocupado, excepto cuando entrenaban, eran competitivos, pero no con el resto, sino consigo mismos, querían que sus padres estuvieran orgullosos de ellos, pues ambos venían de una larga tradición de grandes guerreros, y ellos no querían ser menos, cuando por fin llegaron ambos quedaron asombrados por la belleza del entorno, el sonido del agua era atronador y tapaba casi cualquier otro, justo donde caía en un grupo de rocas el salto de agua formaba un pequeño pero no menos hermoso y mágico arcoiris, justo a su izquierda una inmensa roca plana hacia las veces de cancha de entrenamiento. Bueno muestrame que estás haciendo para ver en que puedo ayudarte_ le dijo el anfibio, Akeru le mostró sus logros_ bien eres muy adelantada para tu edad, nadie de tu edad sería capaz de hacer invocaciones, ni menos podría hacer uso de su chakra ideando un ataque nuevo, eso es nivel jounin, creo que mi ataque de fuego podría serte útil para lograr un ataque convinado, pero primero debemos cambinar nuestros espíritus, como somos amigos no será difícil, concentremonos ambos y veamos que sucede. Ambos pasaron parte de la mañana meditando, luego almorzaron lo que Akeru había traido en la mochila, rieron juntos y siguieron conociendose, en la tarde trataron de sincronizarse, estuvieron hasta el atardecer practicando, cada vez estaban más cerca, gracias al carácter abierto de ambos y de todo lo que habían compartido en un solo día, se habían hecho intimos como si llevaran toda la vida juntos, casi cuando llegaba la hora de irse, un gran ataque de fuego aliento de dragon salió disparado hacia la catarata, fue tal que el vapor no dejaba ver nada, el vapor ascendió al cielo en una inmensa columna de varias metros, ambos quedaron sorprendidos_ estamos listos, una vez más_ dijo Gamakenshin_ lo hicieron y lo mismo, quedaron gratamente asombrados con el resultado de su entrenamiento de ese día_ mañana lo perfeccionaremos, pero ya está la sincronía, ya no te será difícil hacerlo, recuerda el sentimiento cuando estamos junto y todo irá bien_ no había terminado de hablar cuando la niña se desmayó de cansancio, con una sonrisa en los labios_ has usado todo tu chakra, olvido que eres una niña, la verdad es que yo también estoy cansado, usaré lo que me queda para avisar a Naruto y me iré_ así lo hizo, Naruto le agradeció y le mandó mucho saludos para su padre, luego corrió hacia el salto de agua, allí estaba su niña desmayada al lado de la corriente, la tomó suavemente en sus brazos y la apretó contra su pecho, la niña aún conservaba la sonrisa en los labios, pero estaba agotada, la llevó al campamento, la acostó dentro de la tienda y veló su sueño un rato pensando que no importa lo que sintiera, tenía que dejar que su hija caminara sola algunos tramos de su camino, lo único que podía hacer era que ella tuviera la certeza de que él estaba ahí para ella, inamovible, como una roca, se sentía impotente a veces cuando no podía evitarle que sufriera, pero así era la vida sino aprendía que la vida cuesta no iba a estar preparada para la vida dura y sacrificada de un ninja, nunca se lo habia cuestionado, su vida para él era así y lo aceptaba, pero para sus hijos él queria otra cosa, que ojala no sufrieran no se hirieran, no sufrieran daño alguno, pero eso era imposible, al amarlos todo lo de lo ellos le dolía, pero también disfrutaba cuando ellos estaban felices, eso era balance, esperaba que este precario equilibrio durara, aunque lo dudaba, estaba empezando a sentir la misma aprensión que sentía Sasuke, él la había compartido con él, no necesitaba que le diera pruebas para sentirse así, él también sabía que los presentimientos existían,recordó cuando murio Jiraya, él no sabía nada pero sintió una punzada en su corazón, una desazon y luego una presencia a su espalda como alguien despidiendose, un viento suave como un susurro, como palabras que más que escucharse se sienten directo al corazón, esperaba no sentir la partida de ningún ser querido nunca más, otra vez esa aprensión, esa promesa de dejar que eso suceda nunca..., se quedó mirando el fuego crepitar, luego el cielo silencioso inmenso oscuro lleno de estrellas diminutas